Misión
La Asociación para la Promoción del Vino Campo de Calatrava, se constituye con el objetivo fundamental de puesta en valor del Vino del Campo de Calatrava, promoviendo su conocimiento, comercialización y expansión en los mercados.
Un proyecto que pretende aglutinar los intereses y deseos compartidos de todas las bodegas participantes, consolidando la presencia del Vino Campo de Calatrava en los mercados de proximidad y evolucionando hacia una mayor y mejor comercialización en los mercados internacionales.
Actualmente según la Resolución de 31/03/2011, de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, se establecieron las normas relativas al uso de la unidad geográfica menor Campo de Calatrava para los vinos de la Indicación Geográfica Protegida Vinos de la Tierra de Castilla (2011/5607).
Relación de bodegas inscritas que forman parte de la Asociación:
BODEGAS NARANJO (Carrión de Calatrava)
BODEGAS AMANCIO MENCHERO (Bolaños de Calatrava)
COOPERATIVA NUESTRA. SEÑORA DE LAS NIEVES (Almagro)
COOPERATIVA OLEOVINICOLA CAMPO DE CALATRAVA (Bolaños de Calatrava)
ENCOMIENDA DE CERVERA (Almagro)
CLIVIA QUINTA DE AVES (Moral de Calatarava)
BODEGAS ANHELO (Moral de Calatarava)
BODEGAS RECONQUISTA (Miguelturra)
Historia
Campo de Calatrava y viticultura
Edad del bronce
En el Campo de Calatrava se encuentran múltiples vestigios que informan de la producción vitivinícola en la comarca desde la Edad del Bronce hasta nuestros días.
En este sentido, en el Yacimiento conocido como el Cerro de La Encantada, datado en la Edad de Bronce y ubicado en Granátula de Calatrava, recientes excavaciones arqueológicas en el interior de una construcción de carácter ”funerario”, se encontraron copas de barro. Sin duda, estuvieron destinadas al consumo de vino durante la celebración de rituales vinculados al entierro de los difuntos que se depositaban en esa especie de “Panteón”.


A la vista de los resultados arqueológicos, se constata que el vino existía y se usó en ese Yacimiento del Campo de Calatrava desde entre fines del III Milenio y comienzos del II a. de C.
Es importante destacar que también en otros pueblos del Campo de Calatrava existen Yacimientos contemporáneos del citado anteriormente, tales como las llamadas “Motillas”, en las que ese tipo de recipientes también estuvieron presentes y destinados al mismo uso, como en las Motillas de Torralba de Calatrava, de Carrión de Calatrava y de Aldea del Rey, ya que en esos lugares fueron las mismas gentes y de los mismos tiempos que los que habitaron La Encantada.
Época ibérica
El vino en la comarca en épocas cronoculturalmente posteriores, siguió siendo producido y consumido, y está también arqueológicamente probado en el Yacimiento de Oreto (Granátula de Cva) de la época Ibérica, desde el Siglo VI a. de C., y en el transcurso de las excavaciones, realizadas entre 1975 y 1978, aparecieron un buen número de fragmentos de recipientes que, reconstruidos, sus formas equivalían a la de los dolia romanos y que, sin duda, estuvieron destinados a la fermentación del mosto y al posterior almacenamiento del vino producido, en ellos mismos o en ánforas vinarias, de las que también aparecieron algunos fragmentos de época iberorromana y romana.

Entre los yacimientos pertenecientes a la romanización en esta parte de la Hispania, la Oretania, la presencia de ánforas vinarias ha estado presentes en los trabajos arqueológicos.
Época visigoda
De nuevo, y testimoniando también el consumo en el territorio de esta bebida en época Visigoda, tenemos las jarritas de cerámica y de vidrio y vasitos de esos materiales, procedentes del interior de diferentes tumbas del Yacimiento de Oreto-Zuqueca.
Edad Media
En la época de la Edad Media en el 1.147 se conquista Qalat-at-Rabat (Calatrava la Vieja) por Alfonso VII donde se comienzan a hacer donaciones expresas a los “colonizadores o repobladores,” de viñedo y derechos sobre el vino.
La presencia e importancia de la Orden Militar de Calatrava fue trascendental para el impulso de la vid y el vino en el territorio. En 1158, el rey Sancho III entregó la plaza de Calatrava a Raimundo, primer abad del monasterio Fitero, comprometiéndose a defenderla reuniendo en poco tiempo un importante ejército y fundando más tarde la Orden de Calatrava, organizada según la regla del Císter, trasladando a buena parte de los monjes de su monasterio al nuevo de Calatrava.
Será a partir de la victoria en la Batalla de las Navas de Tolosa, el 16 de Julio de 1.212, cuando comiencen a aparecer normas y disposiciones administrativas de la Orden de Calatrava, donde se donan “Cartas Pueblas”, a diferentes localidades de lo que hoy conocemos como Campo de Calatrava. Y como desde esa fecha y en adelante, los Calatravos siguieron dictando resoluciones relacionadas con los viñedos y su explotación, apuntaremos tan solamente a algunas, en el ánimo de completar la idea de que la Orden controló en todos sus territorios y de manera enérgica y efectiva la vitivinicultura.
En la línea de lo apuntado anteriormente, en 1.336, frey Rinalt, abad de Morimundo (a la que se puede considerar como la Abadía Madre de los llamados freyres Calatravos desde la fundación de la Orden), visitó Calatrava La Nueva, siendo Maestre frey Alfonso Pérez, y tras esa visita se ordenó, que los Comendadores que tuvieran viñas en sus Encomiendas y no las cultivasen y las dejasen perder, además de la sanción penitencial que les impusiera el Maestre, serían castigados con la pérdida de su caballo, de sus armas y de su casa.
Territorio
Campo de Calatrava
Edad del bronce
El Campo de Calatrava presenta una continuidad y unicidad geográfica con un pasado histórico compartido que tiene como consecuencia la existencia de una verdadera identidad comarcal.
El área geográfica que, en línea con la exposición anterior, se reconoce actualmente en la marca de calidad comprende la siguiente relación de municipios: Aldea del Rey, Almagro, Argamasilla de Calatrava, Ballesteros de Calatrava, Calzada de Calatrava, Cañada de Calatrava, Carrión de Calatrava, Granátula de Calatrava, Miguelturra, Moral de Calatrava, Pozuelo de Calatrava, Torralba de Calatrava, Valenzuela de Calatrava, Villanueva de San Carlos y Villar del Pozo.
La unidad geográfica del conjunto territorial formado por estas poblaciones viene dada por constituirse el mismo en un elemento de transición entre los Montes de Toledo y la Llanura Manchega, caracterizada además por la presencia de importantes estructuras geomorfológicas de origen volcánico la cuales, además, son las más importantes de este tipo en la Península Ibérica.
La historia del Campo de Calatrava se relaciona con la de la Orden de Calatrava, originada en el Castillo de Calatrava la Vieja (Carrión de Calatrava), que tuvo su sede en Almagro y su casa matriz en el Castillo de Calatrava la Nueva (Aldea del Rey). Su nacimiento se sitúa en una de las etapas más bélicas y decisivas de la Baja Edad Media, ligadas a la fundación de la citada Orden militar homónima, cuya encomienda era la vigilancia y protección de la vanguardia Sur-Suroeste.
En la comarca se dan importantes producciones agroalimentarias como nuestro vino certificado Campo de Calatrava, el aceite de oliva virgen extra con Denominación de Origen Aceite Campo de Calatrava y la berenjena al amparo de la Indicación Geográfica Protegida Berenjena de Almagro. Además de los productos indicados la comarca, de la mano experta de sus agricultores y ganaderos, son muy importantes los cultivos de huerta como la cebolla, patata, tomate y pimiento además de la producción de queso y dulces tradicionales, entre otros.
La climatología,
vegetación y fauna
El clima del Campo de Calatrava queda definido dentro de la tipología de clima mediterráneo continental, bajo el dominio templado-frio, caracterizado por tener unos veranos muy cálidos, pudiendo llegar a alcanzar los 40°C y con unos inviernos muy extremos en los que las temperaturas llegan a descender varios grados por debajo de 0°C. La amplitud térmica suele superar los 20°C, lo que indica una fuerte continentalidad producida por la disminución del efecto moderado de la influencia oceánica.
Las precipitaciones son escasas y se concentran en los meses de primavera debido a las perturbaciones de origen atlántico y los vientos de componente SO-S, lo que a su vez supone una sequía estival muy acusada. Las lluvias oscilan entre los 400-500 mm, variando su distribución en función de la altura. En invierno las precipitaciones disminuyen y predomina las situaciones anticilónicas, siendo frecuentes las heladas nocturnas.
El principal sistema de drenaje en el que se encuentra incluido el Campo de Calatrava es el de la cuenca del Guadiana, que lo riega en su zona norte. Su antiguo nombre latino era Anas, al que posteriormente los árabes añadieron la palabra Wadis, que significa rio. El régimen del rio es exclusivamente pluvial; debido a la irregularidad y escasez de lluvias en la comarca, especialmente en verano, su caudal alcanza los máximos niveles en otoño y primavera. Así mismo ha de destacarse la configuración de un sistema de lagunas cuyo origen es la inundación de cráteres volcánicos.
La vegetación está adaptada a las restricciones hídricas y a las altas temperaturas del verano. Topográficamente, influye por la orientación de la luz y los vientos, cuya manifestación más importante es la contraposición solana-umbria dando lugar a plantas que crecen y se desarrollan únicamente en zonas de solana o de umbría como es el caso del madroño. Estas plantas son de porte arbóreo medio, arbusto y pequeños matorrales, de follaje perenne y zonas adehesadas, todo ello procedente de la degradación del bosque mediterráneo. En cuanto a la fauna, destacan las especies de aves asociadas a las lagunas y zonas fluviales y a los cultivos cerealistas, destacando en este último caso la avutarda y el sisón.
